El ruido se ha convertido en un compañero inseparable a lo largo del día y así lo confirman, seis de cada diez españoles que reconoce estar expuestos al nivel máximo recomendado, lo que puede ocasionar estrés, depresión, ansiedad, trastornos psicológicos y enfermedades cardiacas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que España es el segundo país más ruidoso del planeta por detrás de Japón, y un 72% de los españoles opina que la población en la que vive es ruidosa. Las ciudades de España son ruidosas, mayormente, a causa del tráfico, uno de los ruidos más odiados para el 48%; los bares, pubs y discotecas.
Afecta más a gente joven
La sobreexposición al ruido está generando que la pérdida auditiva asociada al envejecimiento aparezca en edades más tempranas. Entre el 40 y el 50% de los españoles sufren pérdida auditiva cerca de los 65 años, pero en poco tiempo serán las personas de 40 y 50 años las que presenten signos de pérdida auditiva.
El ruido hace que el oído envejezca antes, un 91% de los españoles asegura que falta conciencia y campañas para evitar el ruido y, además, considera que se trata de un problema asociado a la contaminación ambiental.
El ruido en el hogar también molesta
El ruido no solo afecta al exterior porque dentro de los hogares también hay un exceso de ruido. El estudio expone que la mitad de los españoles señala al ruido como principal condicionante de su descanso nocturno, a pesar de que solo un 7% utiliza tapones para dormir.
Los gritos y voces que vienen de la calle afectan al 27% de los españoles mientras los ronquidos de la pareja afectan al 19% y la televisión del vecino al 15%. También destacan los ruidos provocados por fiestas y, sobre todo, el tráfico que afecta al 28% de los encuestados.
Los aparatos eléctricos del hogar también superan el nivel recomendado, 65 decibelios, ya que el aspirador alcanza los 78 decibelios y el secador del pelo llega a los 70.
Ruido en el ocio y en el trabajo
Las actividades de ocio exceden los niveles de ruido recomendados porque al asistir a un concierto, por ejemplo, la exposición supera los 110 decibelios y al escuchar música con auriculares se alcanzan los 90. Los ‘smartphones’ han popularizado el uso de ‘auriculares de botón’ para evitar esta sobreexposición y un 57% de españoles dice utilizarlos.
Referente al trabajo, un 23% de los trabajadores admite que su entorno laboral es ruidoso, y un 80% afirma que está expuesto a más de dos horas de ruido excesivo durante la jornada laboral.
Entre los sonidos que más afectan en el trabajo destacan los comentarios de compañeros (32%), el teléfono (15%) y el ruido de la calle (12%). Todos ellos afectan a la concentración en el trabajo en un 41%, aunque solo el 13% indica que utiliza protectores auditivos mientras trabaja.
Además, existen profesiones que tienen un riesgo auditivo mayor como los controladores aéreos, los mineros, los obreros de la construcción, los carpinteros y los músicos, ‘DJs’ y camareros de discotecas.